
III Encuentro Regional de Educación Ambiental

Los pasados 29 y 30 de enero tuvo lugar en Albacete el III Encuentro Regional de Educación Ambiental, una cita anual que se ha consolidado dentro del calendario de eventos de esta temática, con un considerable éxito de convocatoria en las tres ediciones celebradas hasta la fecha.

Para esta edición, el encuentro estuvo centrado en el eje de Producción y consumo sostenible de la Estrategia de Educación Ambiental de Castilla-La Mancha. Más de 200 personas asistieron representando a sectores que trabajan por la sensibilización ambiental a nivel regional y nacional, y pudieron participar en diversas actividades (con 25 profesionales expertos), en las que se quiso dar visibilidad a todos los ámbitos en los que la educación ambiental interviene de manera transversal para lograr una producción y consumo más sostenibles.
El encuentro se abrió con la intervención de María Negro Barroso, divulgadora y creadora de contenido sobre sostenibilidad, que centró su intervención en el activismo digital e individual, como invitación a que de forma individual seamos capaces de liderar el cambio que queremos ver en el mundo.
A continuación se desarrollaron una serie de mesas de diálogo para abordar la temática del encuentro desde distintas perspectivas. La primera mesa se ocupó de la concienciación ciudadana en las políticas locales en materia de residuos, lo que permitió hacer un recorrido por los principales retos que afrontan las entidades locales respecto a la política de residuos, y la importancia de implicar a la ciudadanía si se quieren alcanzar los ambiciosos objetivos que la Unión Europea establece en esta materia. La mesa fue moderada por Santiago Molina Cruzate, del Instituto Superior del Medio Ambiente, y contó con la participación de José Antonio Gómez Moreno, de la Diputación de Albacete, Santiago Anes Benito, del Ayuntamiento de Alcorcón, y Yolanda Fulgueiras Ortiz, de la empresa Anthesis.
Se hizo un análisis sobre lo que ha fallado hasta hoy a la hora de comunicar a la ciudadanía para lograr esta implicación, destacándose como errores la comunicación desde el buenismo y el voluntarismo, y no desde la responsabilidad y la obligación, o el uso de estrategias más publicitarias que educativas. Los participantes coincidieron en señalar que estamos perdiendo la ocasión de concienciar a la ciudadanía en esta materia, aprovechando la coyuntura actual: implantación de la recogida de biorresiduos, adaptación de tasas municipales, futuras recogidas de material textil, etc. Y se volvió a poner de manifiesto la importancia de la educación ambiental como herramienta de gestión dentro de las políticas locales.

Bajo el título “Más allá de las tres R en el sistema educativo”, la segunda mesa temática hizo una reflexión sobre la superación del esquema de “reducir, reutilizar y reciclar”, para pasar al marco más amplio de la economía circular, y si los centros docentes están preparados para educar en una economía circular.
Moderada por Francisco Javier Gómez García, del Centro Provincial de Educación Ambiental de Albacete, y con la participación de Juan Luis Menchén Martínez, del IES Parque Lineal de Albacete, Gema Caramés Santabaya, de la empresa pública COGERSA de Asturias, y María José Amorós Martínez, del IES Enric Valor de Alicante, en la mesa se destacó la necesidad de integrar la sostenibilidad en la dinámica propia del centro, convirtiéndola en una seña de identidad, más allá de incorporarla a los documentos programáticos.
Para ello, es imprescindible poner al alumnado en el centro del aprendizaje a través de una metodología de participación-acción, y permitir que se integren las inquietudes del alumnado en la programación del centro.
Y todo ello enfocado tanto desde la perspectiva de la comunidad educativa, como la de los que desde fuera del sistema educativo pueden sumar sus esfuerzos para lograr la integración de la economía circular.

La sesión de tarde de la primera jornada se abrió con una mesa titulada “Nuevas narrativas para motivar a la población”, que buscaba, por un lado, analizar los enfoques de las campañas de comunicación, información y sensibilización en materia de residuos que se han realizado en las últimas décadas y, por otro lado, dar a conocer nuevas posibilidades y herramientas desde la comunicación, la información y el marketing ambiental para conseguir la concienciación de la ciudadanía. En la mesa participaron Alexandra Farbiarz Mas, de Comunicación ambiental, formación y coaching, Clemente Álvarez Andrés, de El País y Ballena Blanca, y Jessica Peña Fernández, de IMEDES.
Destacaron la necesidad de explicarle bien a la gente qué es la economía circular, y trasladarle mensajes claros y concisos. En un contexto como el actual, donde la desinformación adquiere cada vez más protagonismo, es necesario información buena, creíble y, sobre todo, fiable. La gente tiene que volver a confiar en el “sistema”, sentirse y verse reflejada, y sentir que sus esfuerzos valen la pena. Y en este sentido, otro de los retos que se señalaron fue el de bajar a la calle, comunicar directamente a las personas, y aportarles soluciones.

Cerrando la sesión de tarde se presentaron tres experiencias consideradas inspiradoras en el ámbito de la producción y consumo sostenibles. Desde FabLab Cuenca contaron cómo, utilizando tecnologías de reciclaje accesibles y herramientas de fabricación digital, se pueden transformar plásticos desechados en nuevos productos útiles, fomentando la economía circular y el compromiso comunitario.
La Cooperativa de iniciativa social “Moda-Re” presentó cómo desarrollan un modelo de gestión del círculo completo de la ropa usada, al tiempo que se generan puestos de trabajo para personas en situación de exclusión social, se resuelven necesidades de ropa para personas vulnerables y, a la vez, se reduce la generación de residuos.
La asociación “El Rincón Lento” expuso el proyecto “Moda sostenible. Reducción del impacto de la industria textil”, mediante el que están desarrollando acciones encaminadas a sensibilizar a las personas consumidoras, y en especial a la juventud, mostrándoles alternativas y formas de consumo y economía más justas y con menor impacto ambiental.

El segundo día del encuentro se abrió con la mesa de diálogo “La sociedad entra en escena: manos a la acción”, en la que se invitó a replantear y analizar desde una mirada más consciente de consumo para tomar decisiones responsables que beneficien a nuestro planeta.
La mesa fue moderada por Carmela Ortega Martínez, de la Delegación de Desarrollo Sostenible de Albacete, y en ella participaron Ángeles Pontes Pazos, de la Fundación Global Nature; Lara P. Román Bermejo, del Observatorio para una Cultura del Territorio, y María Martín Ayala, de Red Alimenta. Destacaron que para encontrar soluciones a la crisis ambiental, es necesaria la participación de las personas del territorio, y hay que ser conscientes de que podemos hacer grandes transformaciones a través del consumo.
Se concedió un especial protagonismo al voluntariado como forma de participación de la sociedad en la búsqueda de soluciones, y se hizo hincapié en la necesidad de crear espacios libres de participación y la importancia de explorar el voluntariado en otros ámbitos menos “tradicionales” (empresas, universidad, etc.).

A continuación tuvo lugar la presentación a los asistentes de la Guía para la elaboración de un Plan Municipal de Educación Ambiental, un documento creado de la colaboración entre la Consejería de Desarrollo Sostenible y la Federación de Municipios y Provincias de Castilla-La Mancha, concebido como una herramienta para orientar a quienes desde la entidades locales quieran afrontar el reto de elaborar su propio plan de educación ambiental adaptado y contextualizado a su realidad.
Y se cerró el encuentro con la exposición de cuatro experiencias inspiradoras. Desde la Delegación de Sanidad de Albacete se expuso el proyecto “Consumópolis20, ¿Sabes lo que consumes? Únete a un consumo más consciente y solidario”, un concurso dirigido a la población escolar, que busca ofrecer a la comunidad educativa una herramienta práctica y dinámica que contribuya al desarrollo integral de actuales y futuras personas consumidoras. “Castilla-La Mancha activa” recordó que las personas con capacidades diferentes también juegan un papel en la consecución de los objetivos de la economía circular, y cómo a través de su proyecto “Disconsumo” están sensibilizando tanto a personas con discapacidad como sin ella, y recordó el papel fundamental de las entidades sociales para generar sinergias y poder llevar a cabo cambios en la sociedad. Desde EMADE se habló del proyecto “Centros + sostenibles”, un programa financiado por empresas cementeras para fomentar el conocimiento de los ODS en los centros docentes. Por último, Amiab habló de los talleres itinerantes de la campaña “Repara, Reutiliza, Recicla”, desarrollada por la Consejería de Desarrollo sostenible en colaboración con los sistemas de responsabilidad ampliada de productores de aparatos eléctricos y electrónicos, que proporciona información a la ciudadanía sobre las posibilidades de dar una segunda vida a sus aparatos eléctricos y electrónicos.
Durante los dos días en que se desarrolló el Encuentro, la artista Ana Navarro plasmó en dibujos y viñetas las reflexiones vertidas en el escenario del salón de actos de la Fábrica de Harinas de Albacete.
