Editorial

En un contexto global marcado por la crisis climática, la pérdida de biodiversidad y la creciente presión sobre los recursos naturales, la transición hacia modelos de desarrollo sostenibles se ha convertido en una urgencia ineludible. Este desafío no puede abordarse desde una única perspectiva, sino que exige la implicación conjunta de instituciones públicas, empresas, organizaciones sociales, y ciudadanía. En este marco, la corresponsabilidad, y la colaboración público-privada se revelan como herramientas fundamentales para promover cambios reales y duraderos.

La dimensión actual de los retos ambientales exige alianzas sólidas entre el sector público y el privado. La colaboración público-privada permite combinar la capacidad reguladora y planificadora de las administraciones con la agilidad, innovación y recursos del sector empresarial.

Un ejemplo de estas alianzas es el programa “Tú eres la llave”, que se puso en marcha en 2022 gracias a la colaboración de la administración regional, a través de la Consejería de Desarrollo Sostenible, y los sistemas colectivos de responsabilidad ampliada del productor (SCRAP) de envases domésticos (ligeros, de papel/cartón, y de vidrio), y de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) de origen doméstico. 

Con anterioridad ya existían cauces de colaboración entre la administración regional y los SCRAP, pero se limitaban al ámbito de actuación individual de cada uno de los flujos de residuos. “Tú eres la llave” fue el primer programa de educación ambiental regional fruto de la colaboración entre la JCCM y los SCRAP que abordaba la recogida separada de una forma global, incluyendo todos estos residuos de origen doméstico.

Este enfoque no sólo ha conseguido dotar al programa de una visión más holística, sino que además ha permitido optimizar los recursos aportados por los SCRAP, y dirigirnos a la ciudadanía con una imagen única, con mensajes conjuntos.

Confiamos en la continuidad de programas que, como “Tú eres la llave”, ejemplifican esa responsabilidad compartida, porque la convergencia entre corresponsabilidad, colaboración público-privada y educación ambiental no es una opción, sino una condición indispensable para garantizar un futuro digno. Solo mediante el trabajo conjunto, la formación integral y la implicación activa de todos los agentes podremos avanzar hacia sociedades más justas, resilientes y respetuosas con el planeta.

Además de un artículo dedicado a este programa educativo, en este número incluimos un artículo sobre el papel de los Centros de Recuperación de Fauna en la conservación del águila imperial ibérica. Si Castilla-La Mancha alberga hoy la mayor población reproductora de esta especie amenazada es en parte gracias a la labor que se desarrolla en estos centros, tanto en el ámbito de la recuperación de ejemplares, como en el de la reproducción en cautividad, la investigación, y la educación ambiental.

Por supuesto también podréis encontrar la actualidad de nuestros espacios protegidos a través del número siete del Boletín de Áreas Protegidas, y las secciones habituales de noticias breves, y “Tú cómo lo ves”, para que podáis remitirnos vuestras fotografías.